Sección: Patógenos del suelo
Abstract: La aparición de determinados microorganismos en un suelo o sustrato después del cultivo sucesivo de la misma especie provoca, en ocasiones, su inhabilitación para la producción. En particular, los cultivos en sustratos en invernaderos se ven afectados por microorganismos infecciosos radiculares que producen pérdidas económicamente importantes. La mayoría de las enfermedades radiculares destructivas que aparecen en estos cultivos se han atribuido directa o indirectamente a hongos de los géneros Pythium sp., Phytophthora sp., Plasmopara sp. y Olpidium sp. que producen enfermedad por si mismos o bien actuando, como este último, de vector. Por ejemplo, la virosis Melon Necrotic Spot o virus del Cribado del Melón en el caso de Olpidium bornovanus, o del Big-vein de la lechuga en el caso de Olpidium brassicae. Estos hongos producen esporas móviles conocidas como zoosporas, que se ven favorecidas en un medio acuático, habiéndose demostrado experimentalmente su propagación por recirculación de la solución nutritiva infectada.El tratamiento con microondas consiste en un método físico de desinfección que busca incrementar la temperatura del suelo y de los microorganismos para conseguir la desinfección al alcanzar puntos térmicos letales "death thermal points". En estos puntos se produce la desnaturalización de las proteínas, haciéndolas inactivas y en consecuencia se produce la muerte del microorganismo patógeno. La frecuencia correspondiente a las microondas cae en el rango de la rotación de las moléculas pequeñas como el agua, entrando estas en resonancia (velocidad crítica de rotación), provocando gran agitación. La resistencia a esta agitación provoca el calentamiento.El tratamiento térmico del suelo por radiación de microondas ofrece una posible alternativa a la desinfección química.
Uno de los problemas que plantea el diseño de aplicadores de microondas es la falta de uniformidad superficial en la transformación de energía, debido a lo cual, la mayoría de aplicadores comerciales realizan una agitación de onda (cambios de la dirección de propagación) y un movimiento mecánico del material irradiado. Este sistema no es eficaz en superficies amplias.
Para una aplicación práctica, dada la condición estática del terreno, se necesita un sistema que realice una distribución de onda superficial homogénea sobre el suelo, permitiendo un calentamiento uniforme. Para este fin se utilizó un guía de ondas que permitiera una distribución superficial.
Desde hace varios años el Departamento de Mecanización y Tecnología Agraria en colaboración con el Grupo de Calentamiento por Microondas de la E.T.S. de Ingenieros de Telecomunicaciones, ambos de la Universidad Politécnica de Valencia, está trabajando en el desarrollo de prototipos de aplicadores de microondas destinados a la desinfección de sustratos y suelos agrícolas.
En este trabajo se ensaya la eficiencia de un prototipo aplicador de microondas con guía ranurada, capaz de irradiar una superficie amplia de suelo en la eliminación de hongos, en vistas a una aplicación de este sistema en un tren de siembra para semilleros.
Estos trenes de siembra están formados por módulos con operaciones independientes. Inicialmente llenan bandejas de alveolos con sustrato, pasando posteriormente por humidificadores y un rodillo de punzonado que produce un pequeño hoyuelo donde de forma automática se deja la semilla. Esta es cubierta con otra pequeña porción de sustrato y se procede a su almacenamiento en invernadero.
La idea es crear un aplicador modular para desinfección de bandeja y sustrato simultáneamente, que se incorpore al tren descrito una vez se ha producido el llenado de las bandejas, y antes de depositar la semilla. Comprar Revista Phytoma 149 - MAYO 2003