Los olivareros españoles están muy preocupados con la bacteria Xylella fastidiosa transmitida por Phylaenus spumarius, un insecto que vive en las arvenses próximas a las plantaciones de olivos, por lo que las coberturas herbáceas, tan beneficiosas contra la erosión y tan favorecedoras de la fauna auxiliar, podrían convertirse en un criadero del insecto vector de la bacteria. Phylaenus spumarius es un hemíptero similar a las especies que los agricultores denominan genéricamente ?mosquitos verdes?. Para alimentarse, el parásito clava su pico en los órganos verdes del vegetal hasta el xilema. En esa operación, si la planta está infectada por la bacteria Xylella fastidiosa, el insecto se contagia y, a partir de ese momento, la inoculará cada vez que clave su pico en otra planta susceptible y sana. En algunas enfermedades de vegetales transmitidas por insectos existe una estrecha relación entre el patógeno, el vector y la especie vegetal; pero, en este caso, esa relación es amplísima, la bacteria es capaz de desarrollar la enfermedad en una gran cantidad de especies arbóreas y herbáceas, y P. spumarius puede alimentarse de muchas especies. Si a ello se añade la facilidad de esta bacteria para formar subespecies y especializar su poder patogénico, nos podemos explicar el miedo que esta enfermedad del olivo, la vid, los cítricos, etc., está provocando en los agricultores.