Agroexpo cerró sus puertas el pasado sábado, después de cuatro días en los que pasaron por las instalaciones de FEVAL (Don Benito, Badajoz) en torno a 70.000 visitantes en una edición, la trigésima, que ha contado con la participación de trescientas empresas, nacionales en su mayoría pero también procedentes de Rusia, Portugal, Marruecos, Italia o Irlanda, entre otros países.

Para José María Naranjo, presidente del Comité Organizador, esta edición de Agroexpo es de las más relevantes por número de asistentes, de expositores y por su apuesta por la tecnología. “Que se hayan presentado 17 propuestas al concurso de innovación empresarial es un dato muy interesante. La falta de alternativas en el campo ha sido siempre una queja común entre los agricultores. Agroexpo ha sabido dar respuesta a esta cuestión, una pequeña prueba de ello son esas empresas que han presentado proyectos que ya son una realidad”. El proyecto ganador se centra en la disminución de la emisión de CO2 a la atmósfera.

Al margen de la Feria, se celebraron varias jornadas técnicas. Una de ellas sobre el cultivo invitado, el olivar superintensivo, a la que asistieron 650 personas. Según José María Naranjo, tanto las jornadas técnicas como el resto de actividades que cubren el programa de la feria han hecho que Agroexpo sea “el punto de referencia para la información, para la formación, para la innovación y sobre todo para venir a hacer negocio”.