La Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (ASAGA Canarias ASAJA) ha demandado al Ministerio de Agricultura establecer en los puertos del archipiélago, de manera urgente, controles fitosanitarios a los tomates importados con el fin de evitar la entrada de Keiferia lycopersicella, una plaga similar a la Tuta absoluta que ataca a este cultivo y provoca daños en las hojas.

Esta reclamación se produce después del anuncio de la Unión Europea de paralizar las exportaciones de tomate de las Canarias en caso de detectarse la Keiferia, “una drástica medida que dejaría al sector tomatero en una complicada situación y podría abocarlo a su desaparición”, según explica ASAGA en un comunicado.

La organización profesional agraria considera que, a pesar del informe emitido por el Servicio de Sanidad Vegetal de la Dirección General de Agricultura acreditando que las islas están libres de la presencia de esta plaga, no se garantiza que la Keiferia no pueda entrar en cualquier momento al no disponer de los controles pertinentes en los puestos fronterizos. “Este panorama nos vuelve a colocar en una situación de vulnerabilidad frente a la entrada de plagas y enfermedades que, históricamente, han entrado en este territorio arruinando nuestros cultivos y perjudicando la rentabilidad de nuestros agricultura y si no se toman las medidas pertinentes estaríamos de nuevo poniendo en riesgo a nuestro tomate de exportación justo ahora que comienza a reflotar su actividad tras un largo periodo de pérdida de renta de los agricultores”, ha declarado la presidenta de ASAGA, Ángela Delgado.

Keiferia lycopersicella es una plaga procedente del sur de Estados Unidos que se encontró por primera vez en Europa en 2008, en el noreste de Italia.