El servicio de Sanidad Vegetal de las Islas Baleares ha confirmado el primer positivo de Xylella fastidiosa en España. La temida bacteria fitopatógena ha sido identificada en tres muestras de cerezo (Prunus avium) en un centro de jardinería de Porto Cristo, en Manacor (Mallorca). 

El Laboratorio Oficial de Sanidad Vegetal de las Islas Baleares (LOSVIB) realizó la primera detección el 6 de octubre en un ejemplar del recinto. Semanas después, el 4 de noviembre, el Laboratorio Nacional de Referencia de Bacterias Fitopatógenas, en el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA), confirmó la presencia de la bacteria en este ejemplar y otros dos cerezos de un segundo lote, tras la aplicación de protocolos de PCR.

Todos los cerezos contaminados pertenecen a una misma partida de un vivero de Alcanar (Tarragona) y llegaron a Mallorca en 2012; unas instalaciones que ya han sido declaradas libres de la bacteria tras la preceptiva inspección de las autoridades sanitarias de Cataluña.

En Manacor las autoridades han procedido a la eliminación mediante incineración de todas las especies del recinto de jardinería susceptibles de hospedar la bacteria (97 pies de 7 hospedantes diferentes), de acuerdo con los listados de la Comisión Europea. Aunque el brote ha sido considerado de poca extensión, en aplicación de la regulación comunitaria ("Decisión de Ejecución (UE) 2015/789 de la Comisión del 18 de mayo de 2015 sobre medidas para evitar la introducción y propagación dentro de la Unión de Xylella fastidiosa"), se han comenzado a destruir también todas las plantas susceptibles de contagio en un área de 100 metros en torno al vivero, que ha sido declarada como ?Zona Infectada?. Además, se ha trazado un área de contención o "Zona Tampón" de 10 km de circunferencia en la que se harán inspecciones detalladas para comprobar si hay más plantas afectadas por la bacteria y se estudiarán sus insectos vectores.

Las especies hospedantes mayoritarias de la zona son las características de las zonas turísticas con hoteles y jardines privados: Olea europaea, Nerium oleander, Polygala myrtifolia, Rosmarinus officinalis y Westringia fruticosa. En la parte agrícola hay cultivos mayoritariamente de secano: almendro (Prunus dulcis), alguna plantación de viñedo (Vitis vinifera), algarrobo (Ceratonia siliqua) y olivo (Olea europaea).

De momento, las restricciones de comercialización y salida de la zona de las plantas vulnerables a la X. fastidiosa solo afectarán a cerezos y adelfas, las dos especies afectadas por la variedad de bacteria encontrada. Además, la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca de las Islas Baleares ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para adviertan de cualquier posible planta infectada al servicio de Sanidad Vegetal.

Esta primera detección de Xylella fastidiosa tiene lugar tras la implementación de un nuevo sistema de control mediante doble protocolo de PCR a tiempo real de las muestras a examen, en las que se amplifican dos partes diferentes del genoma de la bacteria. El mecanismo está vigente desde el 16 de junio en cumplimiento del Protocolo nacional de prospecciones de Xylella fastidiosa y la Decisión de Ejecución (UE) 2016/764 de la Comisión de 12 de mayo de 2016.

Preocupación en el olivar español

Esta primera detección en España confirma los peores temores respecto a la posibilidad de contagio de una bacteria con un alto potencial destructivo y cuya primera detección en Europa data de octubre de 2013 en el sur de Italia (Región de Apulia), donde ya ha causado importantes daños en 10.000 ha de olivo. Por ello, la noticia es particularmente preocupante para el sector del olivar español, donde un hipotético contagio podría causar una crisis agraria sin precedentes. 

Con 300 especies hospedantes la Xylella fastidiosa presenta un alto potencial de propagación que contrasta con la ausencia de métodos de lucha efectivos contra sus  enfermedades. En general, las plantas afectadas padecen un decaimiento rápido y generalizado que, en los casos más graves, seca sus hojas y ramas hasta la muerte del ejemplar.