La Asociación Española de Bioempresas (AseBio) y la Plataforma Tecnológica de Biotecnología Vegetal (Biovegen) se han unido para promover la participación de los socios de ambas entidades en la consulta pública de la Comisión Europea para impulsar un cambio de legislación de las técnicas genómicas novedosas (NGT) relativa a los vegetales, que está abierta hasta el 22 de julio.

La edición genómica es una nueva aproximación a la mejora genética que aprovecha las propias soluciones naturales de las plantas. “Esta tecnología tiene el potencial de contribuir a un sistema agroalimentario más sostenible y ayudar a lograr los objetivos del Pacto Verde Europeo y de la Estrategia de la granja a la mesa para hacer frente a las condiciones adversas provocadas por el cambio climático y el crecimiento de la población”, expone Gonzaga Ruiz de Gauna, gerente de Biovegen.

Países como Estados Unidos, Canadá, Australia o Japón, entre otros, ya han dado los pasos necesarios porque su regulación lo permite: varios cultivos editados genéticamente, así como sus productos derivados, están entrando en el mercado mundial, y muchos más están en desarrollo.

Tras la publicación del estudio en abril 2021 de la Comisión, que confirmaba dichas evidencias, cada vez más científicos y productores insisten en la necesidad de autorizar el uso de estas herramientas también en Europa para no quedarse atrás. “Hay que hacer entender que el producto final conseguido gracias a las NGT es igual de seguro, más sostenible y con mejores características. Las mejoras provocadas por la biotecnología aceleran lo que podría ocurrir naturalmente en los próximos años. Es importante considerar el producto y no solo cómo se ha obtenido. Existe un interés significativo tanto en la Unión Europea como en todo el mundo por las aplicaciones de las NGT en las plantas, y algunas de esas aplicaciones ya están en el mercado fuera de la UE. Ahora nos toca a nosotros subirnos a este tren”, reclama Ion Arocena, director general de AseBio.

Ambas entidades solicitan a la Comisión Europea que adopte “un enfoque proporcionado y no discriminatorio respecto a la mejora genética avanzada en su futura legislación, que permita la completa implementación de los objetivos europeos de sostenibilidad de la producción agroalimentaria utilizando todos los recursos posibles, incluyendo las técnicas avanzadas de mejora genética, que nos permitan hacer frente a los desafíos de sostenibilidad y biodiversidad”.