El Comité de Gestión de Cítricos (CGC) ha donado a entidades benéficas de la Comunidad Valenciana 40.000 euros Y 5 toneladas de mandarinas para financiar su acción solidaria y ayudar a aliviar la crisis provocada por el COVID-19.

El CGC ingresó la donación a Cáritas Diocesana de las tres provincias y a la Casa de la Caridad de Valencia, organizaciones que en las últimas semanas han redoblado sus esfuerzos para atender a los más damnificados por la pandemia. Además, varios operadores han participado, en otra acción paralela promovida por el CGC, en una segunda donación de 5 toneladas de mandarinas, que desde la semana pasada y durante la presente se están distribuyendo entre las anteriores entidades y entre diversas residencias de personas mayores, gracias a la ayuda de voluntarios de Cruz Roja Española.

El CGC también contactó con algunos bancos de alimentos que están trabajando intensamente para atender a las familias que, a causa del confinamiento y del parón económico, sufren necesidad y han pasado a estar en riesgo de exclusión social. Según explica la asociación, “en tales conversaciones se pudo contrastar las dificultades logísticas para almacenar productos perecederos manteniendo las medidas de bioseguridad para prevenir el contagio del coronavirus y para repartir después ése género entre los damnificados. De ahí que algunas de estas entidades hayan reorientado parte de su acción solidaria a la entrega de vales de comida canjeables en supermercados, cuyas principales cadenas también están colaborando solidariamente o al reparto de lotes de alimentación seca”. Atendiendo a estas circunstancias, el CGC decidió compatibilizar la donación de fruta con la entrega de dinero para así ganar en eficiencia.

A las entregas de mandarinas en nombre del CGC cabría añadir las donaciones de cítricos que, a título particular, han realizado diversas empresas asociadas y que normalmente se efectúan en el propio municipio donde se ubica el almacén de confección para así facilitar su distribución.