El Congreso VIO, organizado por el Consejo de Ingenieros Técnicos Agrícolas y Graduados de Valencia y Castellón (COITAVC), ha sido clausurado en Valencia después de cinco jornadas de ponencias y mesas redondas que han reunido a más de cien profesionales de muy distintos ámbitos, con una motivación en común: sensibilizar y a la vez ser parte de la creación de ciudades más sostenibles y humanizadas. Este congreso, que se ha enmarcado dentro de la Semana Verde Europea, también ha acogido el II Foro de BioProtección Vegetal, en el que colabora Phytoma.

El Congreso VIO ha girado en torno a la infraestructura verde urbana. Esta es, según los expertos, la clave de una mejor vida en las ciudades, porque genera salud, revaloriza las zonas donde tiene presencia y aporta espacios de ocio y encuentro, algo que, tal y como se ha destacado reiteradamente en el congreso, ha quedado patente con la crisis de la Covid-19. “La pandemia ha puesto de relieve que necesitamos ciudades más resilientes, verdes y sostenibles. Pero no todo vale, los ingenieros agrícolas formamos parte de los profesionales en los que las administraciones se deben apoyar para contar con una infraestructura verde que tenga un sentido, tanto en su diseño como en su posterior gestión y mantenimiento”, ha afirmado Regina Monsalve, presidenta del Colegio de Ingenieros Técnicos Agrícolas de Valencia y Castellón (COITAVC).

El secreto, según se ha reiterado en el congreso, es la coherencia. Utilizar flora autóctona, adaptada al clima, al suelo, e incluso a las plagas más habituales en cada zona, es parte de una gestión responsable con el entorno. Además, para su cuidado, la bioprotección ha de ser la respuesta mayoritaria y responsable por parte de las autoridades, para impulsar la gestión integrada y reducir el uso de productos fitosanitarios, potenciando la fauna útil, la biodiversidad y, como han subrayado los colectivos médicos, la salud.

El Congreso VIO se ha nutrido de profesionales de diversos perfiles, como ingenieros, arquitectos, psicólogos, médicos, deportistas, científicos, diseñadores, políticos, artistas urbanos, jardineros y un largo etcétera. De esta manera, se ha querido evidenciar como absolutamente todos los profesionales que en algún momento intervienen en la construcción y diseño de las ciudades tienen en su mano la posibilidad de crear entornos más amables y resilientes. Y, si es desde la colaboración entre ellos, sumando disciplinas y sensibilidades, el resultado será óptimo.

El congreso ha sido clausurado por la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà: “Tener una infraestructura verde urbana en las ciudades que pivote en los ciudadanos, es uno de los grandes retos que tenemos por delante, y desde el ámbito técnico nos vais a tener que acompañar en las decisiones que se tomen desde la teoría y desde la gobernanza”, ha comentado.

En el marco del Congreso VIO se ha presentado también el Accelerathon Green Cities, un programa de aceleración de proyectos innovadores dirigidos a la descarbonización de las ciudades mediante el ecodiseño de la infraestructura verde. Esta iniciativa, que nace de la colaboración entre el COITAVC y FINNOVA, seleccionará proyectos transformadores para ayudarles en la búsqueda de financiación europea, ya que, según su director, Juan Manuel Revuelta, en este periodo “quedan más de 12.500 millones de euros en financiación europea para proyectos vinculados al medioambiente y a la economía circular hasta finales de año. Una cifra que alcanzará los 5.300 millones de euros en el periodo 2021-2027 para proyectos LIFE-Medio ambiente”.