Filomena se ha ensañado especialmente con la ganadería en distintas comunidades autónomas y en los olivos de la Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha y Cataluña, según Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos y UPA Madrid. La rotura de pies y el desgajado de ramas, en el olivar y otros cultivos leñosos como frutos secos, pueden derivar en la pérdida de plantaciones casi enteras, además de las dificultades en las zonas afectadas de poder acabar las operaciones de recolección de aceituna.

La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Madrid ha valorado los daños ocasionados por Filomena en la agricultura y ganadería, y ha recalcado la inquietud de los olivareros: “Muchos no han podido acudir aún a sus explotaciones, pero ven los destrozos producidos en los olivos cercanos a los pueblos y se llevan las manos a la cabeza”. UPA Madrid también destaca que la zona de invernaderos de Fuenlabrada ha sufrido daños en el 100% de las estructuras, a lo que hay que sumar el derrumbe de otros tres invernaderos de Villa del Prado. “Siendo el coste por metro cuadrado de 30 €/m2 y la superficie total afectada de unos 60.000 m2, Filomena supone casi 2 millones de euros en pérdidas para este sector madrileño”, calcula la organización.

Según el primer balance de Unión de Uniones, la mayoría de cultivos en la Comunidad Valenciana y Castilla y León no se han visto perjudicados, a excepción de la zona hortícola de Segovia, donde el cultivo de zanahoria puede presentar algún daño, y ciertas partes hortícolas concretas de la Comunidad Valenciana.

Por su parte, Agroseguro avanza que, “aunque todavía no puede conocerse con exactitud su alcance”, los cultivos que en este momento pueden sufrir mayores daños por las bajas temperaturas son las hortalizas de producción invernal al aire libre (alcachofa, brócoli, coliflor, espinaca y lechuga), las hortalizas cultivadas bajo invernadero, los cítricos y el olivar. Las zonas con mayor previsión de afecciones son Castilla-La Mancha, Madrid, Comunidad Valenciana, Aragón, Cataluña, Navarra, La Rioja y el sureste peninsular (Región de Murcia y Almería).

Los daños provocados por este tipo de fenómenos meteorológicos están cubiertos por el sistema español de Seguros Agrarios Combinados. En concreto, los siniestros provocados por nevada y viento están recogidos en todas las líneas de seguro agrario y, en el caso de las heladas –una opción asegurable para los agricultores–, se pueden cubrir los daños que sufran tanto las cosechas como los árboles. Además, el seguro también ofrece la posibilidad de asegurar y proteger las instalaciones y mallas ante los daños que pueden provocar las fuertes tormentas. Adicionalmente, los daños sufridos por el ganado a consecuencia de las bajas temperaturas (hipotermia) o por derrumbe de las instalaciones también se encuentran incluidos dentro de las coberturas del seguro agrario.

Agroseguro recuerda que la presencia de la nieve no es necesariamente negativa para el campo, pues supone una importante fuente para los acuíferos y un aporte de agua adicional para las cosechas. Por tanto, se estima que los siniestros provocados por las nevadas no serán generalizados, aunque sí se esperan graves daños por las fuertes heladas que han acompañado a la tormenta, y que se espera que continúen en los próximos días.