Entidades que representan a los ingenieros agrónomos y agrícolas han expresado su preocupación por las nuevas reglas del Trasvase Tajo-Segura, que contemplan una reducción progresiva del caudal trasvasable, y piden diálogo técnico e inversiones sostenibles.
Los Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos de Levante, Murcia y Andalucía, junto al Consejo Andaluz de Colegios de Ingenieros Técnicos Agrícolas, el Consejo Valenciano de Ingenieros Agrícolas y el Colegio Oficial de Ingenieros Agrícolas y Graduados en Ingeniería Agrícola de la Región de Murcia, han firmado un comunicado conjunto en el que muestran su “inquietud ante la modificación de las reglas de explotación del Trasvase Tajo-Segura planteadas por el Ministerio para la Transición Ecológica”. Estas nuevas normas “podrían afectar seriamente a la viabilidad de uno de los principales motores agroalimentarios de España y Europa: la agricultura de regadío del sureste peninsular”, aseguran.
Los profesionales del sector agroalimentario, desde una perspectiva técnica y constructiva, alertan sobre los posibles efectos de esta medida: pérdida de empleo directo e indirecto en el sector agrario e industrial; reducción significativa en la producción de frutas y hortalizas; mayor presión sobre los recursos locales y avance de la desertificación; y posible encarecimiento de alimentos y riesgos para el abastecimiento.
“El sureste español — la Región de Murcia, la Comunidad Valenciana y Andalucía oriental—constituye la llamada Huerta de Europa, y su agricultura depende en gran medida del agua trasvasada desde la cuenca del Tajo. Esta infraestructura ha sido clave durante décadas para la sostenibilidad económica, territorial y ambiental de la región”, exponen los colegios firmantes, que respaldan al sector agrícola, a cooperativas y comunidades de regantes, y apoyan las peticiones realizadas por entidades como el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (SCRATS), que abogan por un modelo de gestión hídrica equilibrado y justo.
Los colegios firmantes reclaman inversiones en infraestructuras que mejoren la eficiencia, resiliencia y equidad del uso del agua
“Desde el compromiso con la sostenibilidad y el desarrollo rural”, los ingenieros agrónomos e ingenieros técnicos agrícolas y graduados apelan a un diálogo institucional basado en criterios técnicos y en la colaboración entre administraciones. Asimismo, reclaman inversiones en infraestructuras que mejoren la eficiencia, resiliencia y equidad del uso del agua. “Nuestro compromiso es firme: apoyar el desarrollo del regadío, la sostenibilidad territorial, la seguridad alimentaria y el futuro de nuestros jóvenes profesionales”.
La propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de modificar las reglas de explotación del trasvase han generado una fuerte oposición en las regiones receptoras del trasvase: la Comunidad Valenciana, la Región de Murcia y Andalucía. Representantes políticos, organizaciones agrarias y comunidades de regantes han expresado su preocupación por el impacto que estas reducciones podrían tener en la agricultura de regadío, el empleo y el abastecimiento de agua potable. Así, la Asociación de Productores-Exportadores de Frutas y Hortalizas de la Región de Murcia (Proexport) advirtió sobre la posible “fuerte destrucción de empleo” y el desabastecimiento alimentario.
Por el contrario, el Gobierno de Castilla-La Mancha mostró su satisfacción con las nuevas reglas de explotación del trasvase porque priorizan las singularidades del río Tajo y responden a una demanda histórica de la región.
Los consejeros de Agricultura de la Región de Murcia, Andalucía y la Comunidad Valenciana demandaron al Ministerio para la Transición Ecológica la convocatoria urgente de una reunión por esta propuesta. “El Gobierno de la Región de Murcia hará lo que esté al alcance de su mano para frenar esta injusticia y este castigo a la Región y a sus regantes”, afirmó la consejera Sara Rubira.