Internet de las cosas, inteligencia artificial, robótica, big data, tecnología blockchain… El sector agrario no es ajeno a la transformación digital, como reflejan las numerosas jornadas dedicadas a analizar el impacto que va a tener en la actividad de los agricultores y la productividad de las empresas la llamada agricultura 4.0. Una ‘ola’ que amenaza con llevarse por delante a todos aquellos que no estén dispuestos a subirse a ella.

 

Este símil marino fue utilizado por José Blasco, coordinador del Centro de Agroingeniería del IVIA, que moderó una mesa redonda sobre agricultura y nuevas tecnologías dentro de los actos conmemorativos del 150 aniversario de la creación del Jardín Provincial de Aclimatación, germen del actual centro de investigación valenciano. Y aseguró que aún hay tiempo para “surfearla” y no quedarse rezagado ante los cambios que se avecinan.

En la mesa redonda participaron el catedrático Emilio Soria, director del Master en Ciencia de Datos de la Universitat de València; Alfonso Lorenzi, gerente de Marketing Táctico de John Deere Ibérica; Rafael Navarro, cofundador de Innsomnia, Hub de Innovación especializado en la aceleración e incubación de proyectos de base tecnológica; y Rafael Brines, director de Marketing y Comunicación de la agencia Floramedia.

Navarro repasó las grandes tendencias tecnológicas en marcha y cómo pueden impactar en la agricultura. Por ejemplo, la robótica, o más concretamente, los ‘cobots’, robots colaborativos en tareas agrarias en las que la participación humana va a seguir siendo fundamental. O los sistemas de inteligencia artificial, que van a ayudar decisivamente a reducir la incertidumbre en la toma de decisiones. El fundador de Innsomnia lamentó que, mientras en países como China o Estados Unidos, la apuesta por la inteligencia artificial es muy fuerte, en España no “está metido en el debate político; hace falta que entre en los discursos”.

Emilio Soria hizo hincapié en la importancia de la formación para acompañar este proceso: “El agricultor que no sepa usar las nuevas herramientas puede que se quede fuera del mercado”. Para el catedrático de la Universitat de València, “las herramientas están a disposición de todo el mundo; lo complicado es el conocimiento, dotarse de equipos de profesionales cualificados”. En la misma línea, Blasco abogó por adaptar la educación para formar los futuros agricultores.

Dentro del ámbito agrario, otro concepto muy vinculado a la digitalización fue el de sostenibilidad. “Para ser sostenible, a nivel medioambiental y económico, la agricultura tiene que ser digital”, aseguró Alfonso Lorenzi. “Todo lo medible va a ayudar mucho a la sostenibilidad”, apuntó Navarro. “La optimización de la agricultura pasa por la utilización de las nuevas tecnologías”, añadió Soria.

Los ponentes fueron muy claros respecto a las consecuencias de no adaptarse a los cambios. Soria subrayó que no hay alternativa a la digitalización en este mundo globalizado: “O nos ponemos las pilas o estamos en fuera de juego”.

Precisamente, Innsomnia, uno de los dos únicos centros en España reconocidos por la Unión Europea como Digital Innovation Hub, organizó la jornada ‘La Digitalización Agraria: el encuentro entre agricultores y startups’, en la que intervinieron, además de Rafael Navarro, Juan Salvador Torres, secretario general de la Asociación Valenciana de Agricultores AVA-Asaja; César Marcos, periodista especializado en agrodigitalización; Mercedes Iborra, cofundadora de la startup valenciana Visual Nacert; y Fede Pérez, director general de Pulverizadores Fede.

Entre otros temas, allí se habló de la utilización de sensores en el campo, de la trazabilidad de los alimentos con tecnología blockchain y de sustituir la mecanización por la digitalización, como ha hecho Pulverizadores Fede, “una startup de más de 50 años”, en palabras de su director general. La empresa valenciana ha pasado de fabricar maquinaria agrícola a desarrollar atomizadores con tecnología de precisión que ya son utilizados por el fabricante estadounidense John Deere. “La digitalización es la solución para producir más con menos”, zanjó Fede Pérez.

“El agricultor debe perder el miedo a la tecnología, debe tocarla y entender que es su aliado”, planteó Mercedes Iborra. Su empresa agrotech, Visual Nacert, desarrolla soluciones tecnológicas que fomentan la conectividad con máquinas, sensores y bases de datos para automatizar la información y que los agricultores sean más eficaces.