El Parlamento Europeo ha aprobado una resolución que rechaza la propuesta de la Comisión Europea sobre el uso de los plaguicidas en las abejas y solicita que presente una nueva propuesta basada en los últimos conocimientos científicos y técnicos que aumente el nivel de protección vigente.
La propuesta de la Comisión Europea debía incorporar las directrices de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria para evitar una exposición aguda y crónica de las abejas a los plaguicidas. Sin embargo, el borrador únicamente menciona el riesgo de las abejas a sufrir una exposición puntual a los plaguicidas y no incluye como factor la exposición prolongada en el tiempo a los mismos. Según la resolución, el borrador “solo introduce modificaciones (...) con respecto a la toxicidad aguda para las abejas melíferas, pero permanece en silencio sobre la toxicidad crónica para las abejas melíferas, así como sobre la toxicidad para los abejorros y las abejas solitarias”. Además, el texto de la Comisión “no representa los desarrollos más recientes en conocimiento científico y técnico” y “no cambiaría el nivel de protección”, denuncia la resolución, aprobada por 533 votos a favor, 67 en contra y 100 abstenciones.
El 84% de las especies de cultivos y el 78% de las especies de flores silvestres en la UE dependen de la polinización animal. Hasta casi 15.000 millones de euros de la producción agrícola anual de la UE se destinan directamente a los polinizadores de insectos, que juegan un papel fundamental en la conservación del medio natural y el mantenimiento de la biodiversidad.
Por este motivo, la Eurocámara entiende que esta decisión favorece a todos los Estados miembros y, particularmente, a España, que es el país de la UE que más plaguicidas consume, cerca de 80 millones de kilos al año, según los datos de Eurostat correspondientes a 2016.
La Asociación Española de Apicultores solicitó al Congreso de los Diputados en octubre de 2018 la prohibición de todos los plaguicidas tóxicos para las abejas. En enero de este año, la asociación insistió en su demanda e instó a evaluar “todos los plaguicidas tóxicos para las abejas que existen en el mercado” para que “sean sustituidos por alternativas como buenas prácticas agrarias compatibles con los polinizadores y la fauna auxiliar”.
El sector apícola español supone alrededor del 0,44% de la producción final ganadera y el 0,17% de la producción de la rama agraria, y el valor anual de su producción de miel, cera y polen se estima en cerca de 62 millones de euros.
En el ámbito comunitario, España destaca por su censo de colmenas (alrededor del 16% de las colmenas en la UE), de las cuales el 80% se encuentra en manos de apicultores profesionales, que son aquellos que gestionan más de 150 colmenas. El grado de profesionalización de la apicultura en España supera la media de la UE, con alrededor de un 22% de apicultores profesionales.
