La exportación española de frutas y hortalizas frescas creció un 5% en 2020, hasta alcanzar los 14.200 millones de euros de facturación, mientras que mantuvo volúmenes similares a 2019, con 13,5 millones de toneladas, según las estimaciones de la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas.

FEPEX destaca la gran diversidad de productos y una fuerte dependencia del mercado comunitario, receptor del 94% de la exportación española y del que depende la sostenibilidad económica de las explotaciones. El año también se ha caracterizado por un comportamiento muy dispar de las diferentes campañas y una fuerte volatilidad de los precios. "Se cierra un año en el que la producción y exportación hortofrutícola se reveló como una actividad esencial durante el confinamiento, en el que la competencia de terceros países se recrudeció y en el que se cerró un acuerdo post-Brexit que regirá las relaciones futuras con Reino Unido, el tercer destino de las ventas españolas", resume FEPEX en un comunicado.
Durante el confinamiento se mantuvo la actividad productiva y comercial para garantizar el abastecimiento de la población y de los mercados exteriores. Además, las empresas han implantado las nuevas exigencias de seguridad en el campo y en las centrales de manipulación, lo que ha supuesto un incremento significativo de costes. En el ámbito del consumo, la pandemia impulsó la demanda en los hogares españoles, con crecimientos del 13% en marzo, del 40% en abril, del 22% en mayo y del 11% en junio respecto a los mismos meses de 2019.
Por otro lado, la inquietud por la dilación en el acuerdo post Brexit con Reino Unido estuvo muy presente en 2020. Aunque la exportación española a este país, tercer mercado de destino, registró una evolución positiva del 8% hasta octubre (1.547 millones de euros), el sector agrupado en FEPEX ha trabajado con todos los escenarios, incluido el no acuerdo y la llegada de aranceles, valorados en 198 millones de euros al año. Finalmente, el acuerdo alcanzado "evitará estos aranceles, pero no evitará las nuevas formalidades y controles aduaneros que implicará que Reino Unido deje definitivamente la UE el 1 de enero", advierte la federación.
La creciente y continua competencia de la importación procedente de países terceros es otro de los hechos destacados de 2020. La importación creció un 7% hasta octubre, el 64% procedente de países extracomunitarios, con un fuerte impacto en cultivos estratégicos, ya que coinciden en periodos y calendarios con las producciones españolas. Por ello, FEPEX considera que uno de los retos para 2021 es que se aplique una política comercial más justa que "corrija la competencia desleal que actualmente sufren las producciones comunitarias, así como la aplicación de medidas de mejora de la competitividad acordes con el reto que plantea la globalización del mercado comunitario, que representa un porcentaje mayoritario de la facturación del sector".