A petición de los Estados miembros, el Parlamento Europeo, terceros países y otras partes interesadas, la Comisión Europea ha propuesto aplazar un año, a enero de 2022, la entrada en vigor de la nueva legislación sobre producción ecológica, cuya preparación ha ralentizado la pandemia del coronavirus. La CE ha abierto una consulta pública sobre este plan de acción que pretende apuntalar el objetivo de destinar una cuarta parte de la superficie agrícola a la agricultura ecológica en 2030.

Bruselas quiere garantizar que el sector de la agricultura ecológica disponga de los instrumentos adecuados y de un marco legal consensuado y eficiente para lograr los objetivos fijados en el pacto verde europeo y la estrategia ‘De la Granja a la Mesa’. Aunque la nueva normativa en materia de agricultura ecológica proporciona una base sólida, es preciso que la legislación secundaria aún por adoptar tenga el mismo grado de resiliencia. Según explicó Janusz Wojciechowski, comisario de Agricultura y Desarrollo Rural, “la agricultura ecológica será un aliado clave en la transición que estamos liderando hacia un sistema alimentario más sostenible y una mejor protección de nuestra biodiversidad”.

El futuro plan de acción sobre agricultura ecológica, cuya adopción está prevista a principios de 2021, será un instrumento importante para acompañar el crecimiento futuro del sector. Las estrategias sobre biodiversidad y 'De la Granja a la Mesa' contemplan destinar un 25% de las tierras agrícolas a la producción ecológica en los próximos diez años. Para ayudar a alcanzarlo, la Comisión Europea quiere impulsar este plan de acción, que pretende impulsar el sector tanto del lado de la demanda como de la oferta.

El plan actuará desde tres ángulos distintos: estimulará la demanda de productos ecológicos conservando al mismo tiempo la confianza de los consumidores; fomentará el incremento de la superficie dedicada a la agricultura ecológica en la UE; e impulsará la contribución de la producción ecológica a la lucha contra el cambio climático y la pérdida de biodiversidad, así como a la gestión sostenible de los recursos. La consulta pública, que busca recabar las opiniones de los ciudadanos, las autoridades nacionales y las partes interesadas, estará abierta hasta diciembre.

La nueva legislación sobre producción ecológica reflejará la naturaleza cambiante de este sector en rápido crecimiento, según la CE. La normativa está concebida para garantizar una competencia leal a los agricultores, prevenir el fraude y conservar la confianza de los consumidores. Para asegurar el paso expedito de la legislación actual a la futura y para permitir que la industria y los Estados miembros estén totalmente preparados para aplicar la nueva normativa, la Comisión ha propuesto aplazar un año su entrada en vigor, ya que la pandemia ha ralentizado el trabajo de preparación del Derecho derivado.

Bruselas tiene previsto asignar en 2021 un presupuesto específico de 40 millones de euros para la agricultura ecológica, que servirá para financiar acciones de promoción y campañas de información sobre el sector de la agricultura ecológica. Además, la política agrícola común (PAC) actual y futura seguirá apoyando el desarrollo de la agricultura ecológica en la UE. Por ejemplo, las medidas de los programas de desarrollo rural ofrecen apoyo a los agricultores que desean pasar a la agricultura ecológica y a los que conservan este tipo de agricultura.