La Consejería de Agricultura del Gobierno riojano ha confirmado la identificación de las primeras manchas de mildiu en las localidades de Fuenmayor y San Asensio. Según la Sección de Protección Cultivos, las manchas aparecidas son aisladas y la situación fitosanitaria de los viñedos de La Rioja resulta óptima. La aparición de estas primeras manchas obliga a prestar mayor atención a la enfermedad, sobre todo en la proximidad de floración.

El viticultor César Larios ha detectado la primera mancha de mildiu de 2022 en el viñedo de La Rioja, en el término La Conejera de Fuenmayor. La segunda mancha fue comunicada por el viticultor Carlos Hernando, de San Asensio, en el Camino de Villarica. La Sección de Protección de Cultivos de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Mundo Rural, Territorio y Población ha verificado y confirmado ambos avisos de mildiu, así como los posteriores, en Huércanos, Fuenmayor, Arenzana de Abajo y Cárdenas.

El mildiu de la vid es una enfermedad ocasionada por el hongo Plasmopara vitícola. Puede causar daños importantes si las condiciones climáticas son favorables durante el desarrollo de la vid –principalmente lluvias abundantes y continuas-. Es fundamental conocer la fecha de aparición de las primeras manchas, ya que es el punto de partida de la estrategia de control de la enfermedad. Con tal fin, el Gobierno de La Rioja, en colaboración con la Fundación Caja Rioja y Caixa Bank, convoca desde 1974 los Premios Mildiu para reconocer cada año la labor de los viticultores en los cuidados que proporcionan a sus viñedos.

La prevención que implica conocer rápidamente la aparición del hongo permite determinar el momento más oportuno para realizar los tratamientos adecuados. De este modo, se evitan numerosos tratamientos innecesarios, con el consiguiente ahorro económico para el agricultor y con la disminución del uso de fungicidas. 

La Consejería de Agricultura recomienda esperar a la aparición de los primeros síntomas para la realización del primer tratamiento frente al mildiu, siempre que se vigilen los viñedos, ya que se presentan generalmente en manchas aisladas sin causar daños. Sin embargo, en años de invierno e inicio de primavera con humedad alta en el suelo, deben iniciarse en cuanto existan condiciones para la primera contaminación. Se recomienda realizar al inicio de la floración un tratamiento con un producto sistémico, ya que el periodo floración-cuajado es el más sensible. Asimismo, no es recomendable labrar durante este periodo, porque se crean condiciones favorables para la contaminación del racimo.

La Rioja no es la única región vitivinícola en la que han aparecido las primeras manchas de este patógeno. En Andalucía, el Departamento de Sanidad Vegetal de la Delegación Territorial de Córdoba ya confirmó el 25 de abril su presencia en el término municipal de Montemayor.

En la Comunidad Valenciana, su Servicio de Sanidad Vegetal recomendó el 3 de mayo realizar tratamientos fungicidas, en aquellas parcelas con viñas receptivas al ataque del hongo (brotes superiores a 10 cm), y advertía de la existencia de una cantidad importante de inóculo de la enfermedad como consecuencia de los ataques producidos en la campaña anterior. Los órganos de conservación del hongo están muy maduros, debido a humedades altas y temperaturas suaves del final del invierno, primera condición para que se produzca una contaminación de mildiu. Además, las lluvias registradas durante marzo y abril originaron un contenido de humedad en los suelos importante.