La división de Fisiología Vegetal de Bioibérica presentó en la Feria Internacional del Sector de Frutas y Hortalizas, Fruit Attraction, AminoQuelant®-Ca/Mg y AminoQuelant®-Cu. Se trata de dos nuevos productos de la gama AminoQuelant® que estimulan la recuperación del equilibrio fisiológico para que la planta pueda empezar a asimilar los nutrientes que precisa, además de asegurar que los microelementos llegan de una manera eficiente, segura y rápida al lugar de consumo. En ellos, se combinan los L-?-aminoácidos del exclusivo proceso de Hidrólisis Enzimática de Bioibérica, con nutrientes, en un único formulado.

El calcio es un elemento imprescindible para la división celular durante el crecimiento de las raíces, formando parte, también, de las paredes celulares. Por su parte, el magnesio es el componente central de la clorofila, y por tanto es de vital importancia para la fotosíntesis y el crecimiento vegetativo de la planta. Gracias al aporte conjunto de calcio y magnesio con aminoácidos de Hidrólisis Enzimática, la planta absorbe rápidamente estos elementos y se ve favorecido el transporte de éstos a los órganos de crecimiento del vegetal donde son requeridos. AminoQuelant®-Ca/Mg está especialmente indicado para la prevención y corrección de fisiopatías causantes de deshidratación heterogénea en los tejidos vegetales. Ideal para raquis débiles y palo negro en uva de mesa y vinificación.

Por su parte, el cobre forma parte de moléculas esenciales para procesos como la fotosíntesis, la respiración y la lignificación. Por ello, su presencia es indispensable para lograr el máximo nivel de estos procesos vitales. Así mismo, también toma parte en diversas reacciones enzimáticas necesarias para los procesos de reproducción y defensa. La carencia de cobre es frecuente en suelos básicos y/o con un exceso de calcio. Esta escasez afecta especialmente a cultivos de gramíneas y leguminosas. Con AminoQuelant®-Cu se combate la carencia frecuente de Cobre en suelos básicos y/o con un exceso de calcio que afecta especialmente a cultivos de gramíneas y leguminosas. En el trigo, los síntomas más palpables son la clorosis y la limitada producción de las espigas. En el olivo, la aplicación de cobre es también importante para favorecer la correcta formación y protección del fruto.