Se detecta en el Levante español en 2013, durante el año 2014 se observa una gran proliferación en los cítricos de las comarcas cercanas a Valencia.
Por su comportamiento y por los síntomas que ocasiona podría confundirse con el ácaro rojo (Panonychus citri)

En las colonias se observan a simple vista o con lupa, individuos de todos los estadíos, distribuidos por toda la hoja, aunque preferiblemente en el haz. Son de color variable, desde anaranjado rojizo hasta verde amarillento. La hembra de Eutetranychus Banksi presenta un aspecto más liso. Los machos se caracterizan por la longitud de las patas, mayor que la del cuerpo y fácilmente reconocibles. Las puestas se distribuyen por todo el haz de la hoja, especialmente cerca de las nerviaciones. Carecen del típico pelo del Panonychus citri y son de color claro.

Se localiza en las hojas totalmente desarrolladas, siendo solo en ataques muy fuertes localizable en frutos. A nivel del árbol, el ataque suele aparecer en las zonas altas y orientación sur-sureste. Buscaremos la presencia de individuos en hojas maduras, expuestas al sol y en los bordes de las parcelas, junto caminos y/o acequias.

Eutetranychus Banksi es polífago y además de cítricos se encuentra sobre Papayas, Judías, algodón?observándose también sobre vegetación espontánea.

Los daños se observan con el típico punteamiento que otorga un color plateado a las hojas y decoloración en los frutos que están muy atacados. En ataques intensos, combinados con condiciones ambientales adversas (baja humedad ambiental y viento), se llegan a producir grandes defoliaciones sobretodo en las partes más expuestas del árbol.

Medidas de control:

Vigilar la presencia del ácaro de Texas en la parcela, sobre todo a finales del verano. No existe un umbral establecido ya que se trata de una plaga reciente. Podemos considerar un umbral de 1 a 3 hembras por hoja, o utilizar umbrales similares a los del Panonychus citri. Un 20% a finales del verano y otoño y un 80% el resto del año.
Hay que evitar realizar tratamientos innecesarios, si es posible, tratar solo en focos. Los aceites minerales pueden ser una buena alternativa, actuando como ovicidas y adulticidas, respetando a los enemigos naturales y además son menos favorables a la inducción de resistencias.

Productos autorizados: Aceite de parafina 79%, clofentezin, etoxazol, fempiroximato, hexitiazox, spirodiclofen, tebufenpirad.

Los enemigos naturales más eficaces son los fitoseidos Neoseiulus californicus, Euseius stipulatus.