El Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Medioambiental (IMIDA) ha advertido de la peligrosa expansión detectada en la plaga de la avispilla del almendro (Eurytoma amygdali) y del grave riesgo que puede generar a las plantaciones de almendro de la Región si no se adoptan rápidamente medidas de prevención y control eficaces y sostenibles.

El IMIDA, en colaboración con los responsables del sector, Oficinas Comarcales y el Servicio de Transferencia de la Consejería de Agricultura, ha establecido un programa de divulgación que incluye reuniones presenciales en las principales comarcas productoras de almendra, una mayor disponibilidad de información sobre la plaga a través de la web del IMIDA, así como la intensificación de las informaciones aportadas por el Servicio de Sanidad Vegetal. Durante noviembre, se celebraron jornadas divulgativas en Mula, Bullas, Jumilla y Yecla para explicar la evolución de esta plaga durante los últimos tres años y la previsión en su extensión y en sus daños, en función de las actuaciones que se apliquen por parte de los productores.

Una de las principales conclusiones es que se puede limitar la colonización de la plaga y la expansión de daños adoptando unas medidas muy básicas en aquellas zonas donde todavía no causa daños y ajustando las estrategias de control en las zonas en las que ya está implantada. Así, la medida de prevención más eficaz consiste en la revisión y retirada de los frutos afectados (detectables por su aspecto ‘aborregado’) durante el otoño-invierno. En plantaciones convencionales con fuerte incidencia, además de eliminar los ‘borregos’, debe iniciarse también un tratamiento a base de productos fitosanitarios que deben ser aplicados en el momento óptimo para aumentar la eficacia real de estos productos. Los fitosanitarios de origen natural aplicados en plantaciones ecológicas han demostrado, sin embargo, una eficacia bastante menor en el control de esta plaga, por lo que desde el IMIDA se sigue trabajando para encontrar otras alternativas.

La avispilla del almendro es una plaga en expansión y una de las más peligrosas que pueden afectar a este leñoso, ya que puede provocar pérdidas en la producción superiores al 70%. Ataca directamente al fruto, ya que las larvas se alimentan del interior de la pepita. Su desplazamiento se produce básicamente por el uso de camiones y maquinaria usada en producciones afectadas, así como por el vuelo a corta distancia de ejemplares adultos.