Tailandia, con 91; Sudáfrica y Kenia, con 63; India, con 56, y Laos, con 50, encabezan las interceptaciones de organismos nocivos para la sanidad vegetal en los puntos de acceso a la Unión Europea entre enero y noviembre de 2023. En total, la herramienta Europhyt registró 1.033 interceptaciones; de los 238 rechazos por la presencia de plagas y enfermedades prioritarias en ese periodo, la mancha negra y la falsa polilla fueron las más frecuentes.

Según la información analizada y recopilada por la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía, hasta noviembre se produjeron 77 detecciones de Phyllosticta citricarpa, hongo causante de la mancha negra de los cítricos, de las que 51 se produjeron en cargamentos de cítricos procedentes de Sudáfrica (26 sobre naranjo dulce, 16 sobre limón y el resto sobre otras variedades).

De la falsa polilla, Thaumatotibia leucotreta, hubo 66 interceptaciones, de las que 22 procedían de Kenia, 17 de Uganda y ocho de Etiopía. En 37 casos, las detecciones se dieron en importaciones de rosas. En el mes de diciembre, hay que sumar los tres rechazos en cargamentos de granadas procedentes de Israel.

Otro dato destacable son las 53 interceptaciones, la mayoría en importaciones de frutos subtropicales (mango y guayaba), de tefritidos calificados como plagas prioritarias: Bactrocera dorsalis (38), B. zonata (1) y Anastrepha ludens (14). Otra plaga polífaga muy peligrosa, Spodoptera frugiperda, fue detectada en 41 ocasiones, procedente de Perú (12) y Kenia (7) principalmente, en una amplia variedad de productos importados, sobre todo espárrago (14), rosa (5) y maíz (3).

Europhyt, gestionada por la Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria de la Comisión Europea, aporta información sobre el país de origen de la plaga, el material vegetal importado y el organismo nocivo interceptado. De esta forma, los países pueden identificar posibles vías de introducción a partir de las detecciones producidas con anterioridad. “Estos datos son importantes ya que nos hacen tener una visión globalizada de las amenazas existentes, pudiendo conocer aquellos países donde están presentes las plagas y por tanto calibrar el riesgo de introducción de las mismas a través de las importaciones de material vegetal proveniente de estos países. Por otro lado, permite la elaboración de estrategias que permitan un mayor aprovechamiento de los recursos existentes en el ámbito de la sanidad vegetal, dirigiendo las prospecciones hacia áreas, cultivos y actividades relacionadas con las detecciones realizadas”, valora la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía en su resumen.