Otra nueva campaña la climatología ha sido el factor más influyente en el comportamiento biológico de los diversos patógenos y / o fisiopatías que suelen afectar a los cultivos que evolucionan anualmente en Navarra. Como dato informativo comentar que actualmente en Navarra existen las siguientes Normativas en vigor de Producción Integrada:
- Cultivos extensivos secano-regadío: cereales.
- Cultivos extensivos regadío: arroz.
- Frutales: manzano y peral, melocotonero y nectario.
- Hortícolas en invernadero: tomate.
- Hortícolas al exterior: alcachofa, crucíferas, espárrago, lechuga y tomate de industria.
A continuación se exponen de los cultivos más importantes en Navarra, comentarios agronómicos e incidencias fitosanitarias mas destacadas, así como temas de interés relacionados con el mundo de la Sanidad Vegetal ocurridos en la campaña 2004.

Cereales

El cultivo de cereales alcanzó 245.400 ha, destacando en trigos la variedad Berdún y en cebadas la variedad Hispanic. Del total de la superficie, el 40% es de cebada, el 27% de trigos, un 3,5% de avena y el resto 29% de barbecho tradicional o retirada. Los cultivos alternativos guisante, habas, veza, colza y girasol, con 12.250 ha, poco a poco van tomando importancia, destacando el guisante proteaginoso con 7.340 ha.

Desde el punto de vista técnico y medioambiental lo ideal sería que se cultivaran dos tercios de cereal y un tercio de cultivos alternativos ó barbecho, pero todavía se está lejos de esa distribución. Un otoño lluvioso creó dificultades y retrasos en la siembra (incluso parcelas se quedaron sin sembrar), hecho que provocaría pérdidas de cosecha. No obstante, desde final de otoño hasta mediados de primavera, llovió más de lo habitual, favoreciendo el desarrollo de los cultivos, pero al mismo tiempo ese exceso de lluvias provocó lavados de nitrógeno, hecho que afectó a la calidad proteica de trigos y cebadas.

Luego la primavera seca y calurosa destruyó las buenas expectativas de cosecha en zonas tardías del norte de Navarra, causando asurados importantes, especialmente en trigos. Sin embargo, la cosecha de cebada fue en general buena sobre todo en el secano de la mitad sur de Navarra.

Desde el punto de vista sanitario no ha sido un año especialmente problemático, pero se podrían matizar algunos puntos interesantes en los apartados de plagas, enfermedades y malas hierbas. En plagas volvió a observarse la presencia del pulgón Rhopalosiphum padi, transmisor del virus del enanismo amarillo de la cebada (BYDV), sobre cebadas de ciclo largo en las zonas consideradas endémicas. Los muestreos que se realizan anualmente sobre "ricios" al final del verano, mediante test Elisa, suelen ser indicativos de la posible problemática de la nueva campaña, sin embargo cuando los resultados son negativos, no son un seguro de que en esa campaña no aparecerá virosis, como ocurrió la pasada campaña.

En esas zonas se aconsejan pulverizaciones con piretroides autorizados en el estado entre 3 hojas e inicio de ahijado, bien solos o en mezcla con herbicidas. Al mismo tiempo el ITG Agrícola continúa sus ensayos, evaluando y comparando otras técnicas de control, como la desinfección de semillas con Escocet, cuyos resultados son buenos pero no superan al conseguido con la pulverización estándar. Y también a través de variedades "tolerantes" al virus, como es el caso de la cebada Naturel, con la que se consiguen buenos resultados productivos y sin tratamiento insecticida.

En enfermedades, el habitual problema de "espigas blancas" en trigo, ocasionado por hongos que afectan al cuello y raíz de las plantas, sobre todo por Tapesia spp. y la roya parda, no fueron problemáticos quizás por la escasez de lluvias de la primavera. Solamente cabe señalar los ataques de "mancha romboidal" Rinchosporium secalis, que ataca a las hojas reduciendo la superficie foliar útil y por tanto su productividad. Afecta sobre todo a variedades de cebadas de 2 carreras que se siembran en ciclo largo. Según los ensayos del ITG Agrícola, con el uso de los fungicidas Dividend, Premis y Vincit en la desinfección de la semilla, se pueden conseguir resultados aceptables. Con las pulverizaciones al final de ahijado, aumentan los rendimientos de cosecha, pero la cosecha adicional obtenida no suele compensar el coste del tratamiento en nuestras condiciones agroclimáticas.

Con relación a las malas hierbas, en los últimos años, se están observando en ciertas zonas cerealistas de nuestra Comunidad, algunos problemas en el control químico de determinadas especies de malas hierbas como amapola, Papaver roheas, bromo, Bromus spp, vallico, Lolium spp y ballueca, Avena spp. En el caso de la amapola parece clara su resistencia al grupo herbicida de las sulfonilureas (Granstar, Posta,...). En el del vallico y ballueca, también se ha comprobado la resistencia al grupo herbicida de los fop (Topik, Iloxan, Puma) o de los dim (Splendor). Hay que tener en cuenta que en los cultivos alternativos también se utilizan herbicidas de estos grupos, de los fop (Agil, Fusilade, Galant) o de los dim (Focus, Aramo, Centurión), dato que aumenta más las posibilidades de crear y/o aumentar esas resistencias.

Hay que destacar los buenos resultados conseguidos en los dos últimos años, con un nuevo herbicida antigramíneo de la familia de las sulfonilureas, próximo a registrarse en España y ya autorizado en otros países de la UE, se trata del Atlantis. Es selectivo en trigo y se aplica en postemergencia de las malas hierbas. En los ensayos del ITG Agrícola, ha mostrado buenas eficacias contra Avena spp, Lolium spp, Phalaris spp y Alopecurus myosuroides. Además, aplicado en un ensayo contra Avena spp resistente a herbicidas de los grupos fop y dim, se comportó muy eficaz. 

 

Cultivos alternativos de secano

La superficie de colza sigue en mínimos con 500 ha y otro cultivo de la misma familia Brassica carinata destinada a biomasa aunque aumento un 41% apenas se siembran 210 ha. En sanidad vegetal además de los limacos gris Deroceras reticulatum y negro Arion ater, tuvieron bastante incidencia los gorgojos, tanto del tallo Ceuthorrynchus napi como el de las silicuas Ceuthorrynchus assimilis. No se realizaron tratamientos contra ellos. La superficie dedicada a guisante proteaginoso descendió en un 22% al no poder sembrarse por las lluvias, quedando en 5.730 ha, sin embargo la destinada a habas pienso aumentó un 14%.

Los ataques de sitonas Sitona lineatus siguieron produciéndose como otros años y se recurrió a tratamientos para su control. En primavera aparecieron los ataques de pulgón verde Acyrtosiphon pisum en guisante y pulgón negro Aphis fabae en habas. Solamente en algunas fincas se realizaron tratamientos insecticidas. Las vezas sativa y villosa también redujeron su superficie en un 34% sobre una superficie de unas 1.400 ha y lógicamente debido a la imposibilidad de sembrar por las lluvias. Solamente en primavera y en vezas para semilla, se intervino químicamente contra pulgón Aphis craccivora.

En lo relacionado con malas hierbas, casi todos esos cultivos se tratan con herbicidas en presiembra o preemergencia y después en postemergencia, si hiciese falta, con herbicidas específicos contra gramíneas, con el fin de reducir sus poblaciones para la alternativa cerealista.  

 

Maíz

Su cultivo ha aumentado bastante y entre maíz grano y forrajero se llegó a 18.300 ha. Las lluvias en abril impidieron la buena implantación del cultivo e incluso hubo abundantes resiembras. Las lluvias volvieron al final del ciclo en noviembre, originando un retraso considerable al final de la maduración y recolección. Todo ello motivó un irregular desarrollo que sumado a otros factores definieron una mala campaña, hasta el punto de descender la producción de maíz grano un 20%. Con relación a la sanidad vegetal, en las primeras fases del cultivo los gusanos grises, ocasionaron algunos daños, apreciándose un ligero aumento de sus poblaciones con relación a otros años.

La presencia de taladros especialmente Sesamia nonagroides, fue menor que otras campañas, pasando la primera generación desapercibida. Un año más se realizó un ensayo con maíces transgénicos comparándolos con sus respectivos isogénicos. Como ocurrió en otros ensayos de años anteriores, los OGM casi no tuvieron ataque por taladros (S. nonagroides y Ostrinia nubilalis), mientras que sus isogénicos los tuvieron, aunque luego en producción no hubo ninguna diferencia significativa entre ellos.

Desde hace dos años la Estación de Avisos del ITG Agrícola, está controlando trampas con feromonas para detectar la presencia del criocero Diabrótica virgifera, en 5 localidades repartidas por toda la Comunidad. Hasta el momento las capturas han sido nulas. La mala implantación, evolución y maduración, motivaron la presencia del hongo Fusarium roseum, que al afectar a la base de las plantas produjo su caída al final del ciclo.

A partir de junio del 2007 con la desaparición del herbicida atrazina se creará un vacío importante en todas las zonas de maíz, hasta poder disponer de herbicidas sustitutivos con buena tolerancia, eficacia, menor impacto ambiental y rentabilidad. Por otra parte el uso continuado de la atrazina, ha provocado la aparición de hierbas resistentes que se han convertido en graves problemas, como Abutilon theophrasti, Datura stramonium, Xanthium strumarium, etc. Por todo ello desde hace unos años el ITG Agrícola ha realizando ensayos con el fin de buscar soluciones a esos problemas.

Entre los herbicidas que presentan menor impacto ambiental y resultan eficaces contra esas hierbas están: Banvel D, bromoxinil, Callisto, Lagón, Lontrel, Samson, Spade o Starane.

 

Arroz

Destacar la variedad Guadiamar, que se siembra en el 61,3% de las 2.000 ha dedicadas a este cultivo. Las siembras se retrasaron unas dos semanas debido a las lluvias primaverales, que impidieron preparar las tierras. De nuevo las lluvias, pero esta vez en forma de inundación el 7 de septiembre, provocaron cuantiosos daños en la zona de la Ribera del Ebro.

Hubo parcelas que se perdieron totalmente y las que se recolectaron debido al barro arrastrado, su maduración y la calidad del grano fue baja y provocó importantes descuentos por impurezas. En el plano fitosanitario, la Piriculariosis sigue siendo la única enfermedad que aparece en nuestra Comunidad y precisamente esta campaña hay que destacar la sensibilidad de la variedad Thainato a la misma, que le provocó pérdidas de producción en torno al 25%.

Por otra parte las malas hierbas siguen siendo el mayor problema que presenta este cultivo. Además de Echinocloa spp. y arroz salvaje, hay que destacar las grandes infestaciones de Cyperus difformis. Con la gama disponible de herbicidas, pueden conseguirse resultados satisfactorios.

 

Frutales de hueso

La superficie de estos cultivos se mantiene estable desde hace unos años, con 5.340 has, de las que el 70% son almendros, el 21% melocotonero y el 6% cerezo. El 3% restante lo comparten endrino y ciruelo. En sanidad vegetal, las enfermedades y plagas han estado por encima de sus medias históricas. En enfermedades, el melocotonero y nectarino, sufrieron en primavera severos ataques de Abolladura, debido a la imposibilidad de realizar tratamientos por las lluvias.

Continúan apareciendo durante la recolección y unos días después de la misma, podredumbres de frutos causadas por alguno/s de los hongos, Botrytis spp, Monilia spp, Penicillium spp y Rhizopus spp. En plagas, desde mediados del mes de agosto se apreciaron de forma similar daños de Anarsia lineatella y de Cydia molesta en los frutos. Desde la segunda quincena del mismo mes se empezaron a observar los daños de Ceratitis capitata, aumentando de forma importante durante septiembre y octubre.

En melocotoneros y cerezos se han detectado ataques de taladro rojo de madera Cossus cossus. En algunas zonas y plantaciones está provocando daños, incluso la muerte del árbol. En estos momentos se está ensayando, con la firma Open Natur, medios de control a través de capturas masivas con feromonas, ubicadas en trampas especiales. La mosca del cerezo hasta el año pasado, realizaba su biología en la zona norte de cultivo en un valle cerca de Pamplona.

Este año ha ampliado su zona de influencia y ha causado daños en la Ribera del Ebro, que además es la zona con mayor superficie de cultivo. En endrino y ciruelo hay que destacar las bajas capturas de Cydia funebrana y la presencia de una nueva plaga desde el 2003, Xylotrechus arvicola (tornillo de las cepas), un taladro de madera que también se ha localizado en cerezo y cuyo vuelo según nuestras observaciones va desde mayo a agosto. Por el momento se desconoce un buen medio de control.

 

Frutales de pepita

Como ocurre con los frutales de hueso, su superficie se mantiene estable desde hace unos años, con 1.725 ha, repartidas casi al 50% entre perales y manzanos (un poco más los perales). La problemática sanitaria de estos cultivos ha variado muy poco, pero se puede comentar algún punto interesante. En enfermedades, no aparecen otros focos de Erwinia amylovora en la zona norte donde se procedió a su erradicación, ni tampoco nuevos en las zonas típicas de estos frutales en la Ribera del Ebro.

Los ataques de moteado en fruto Venturia inaequalis, aunque siguen siendo importantes, sobre todo en variedades rojas de manzanos del grupo Fuji o Gala, el año pasado se apreció una disminución importante de su incidencia. Igualmente en peral Conferencia, apareció la septoriosis Septoria piricola en menor intensidad que otros años.

En cuanto a plagas Cacopsylla pyri, volvió a tener problemas de control con la abamectina, teniendo que recurrir a otros tratamientos para reducir sus poblaciones a umbrales normales, sobre todo con el insecticida amitraz.

Las pérdidas de frutos originadas en la campaña de 2003 por la filoxera del peral Apanostigma pyri, se han reducido casi por completo durante esta campaña, gracias a los tratamientos realizados en momentos clave del ciclo vegetativo, indicados por la Estación de Avisos.

Los taladros de madera sobre todo el amarillo Zeuzera pyrina y el rojo C. cossus, tienen bastantes problemas para un buen control. En la actualidad se están efectuando tratamientos de confusión sexual, de la firma Shin-Etsu, en plan experimental contra Z. pyrina en la zona de Tudela y los resultados son prometedores. En recolección se han repetido, con más intensidad que otros años, en bastantes parcelas de manzanos daños originados por Bitter-Pit

Nota: En ambos tipos de frutales hay que destacar importantes daños producidos por topillos en cualquier época del año, sobre todo en otoño e invierno, llegan a secar los árboles, a veces tramos de líneas completos. La especie más importante es el topillo subterráneo Microtus duodecemcostatus. Los tratamientos con anticoagulantes como, brodifacoum, bromadiolona y difenacum, aunque eficaces no llegan a solucionar el problema.

 

Olivo

La superficie de este cultivo ha vuelto a experimentar un crecimiento del 5,2%, situándose en este momento en unas 4.460 ha. Las nuevas técnicas introducidas, sobre todo la recolección mecánica, han provocado sin lugar a dudas el aumento importante de este cultivo en Navarra. Respecto a la sanidad vegetal, en enfermedades destacó el repilo Cycloconium oleaginum, ya que provocó caídas de hojas en primavera debido a las infecciones ocurridas con las lluvias otoñales.

En plagas hay que destacar el aumento observado en todas las zonas por la cochinilla Saissetia oleae, incluso algunas parcelas volvieron a "vestirse" con Negrilla, hecho que no ocurría desde hace unos años. Esta campaña los daños de polilla Prays oleae, fueron importantes en todas las zonas, quizás por la remisión de los tratamientos en prefloración.

La mosca Bactrocera oleae, ocasionó menos pérdidas que en campañas anteriores, incluso en las zonas más endémicas de la zona sur. Se ha continuado ensayando el método de lucha basado en las capturas masivas de adultos, mediante trampas alimenticias colocadas a primeros de julio (una/árbol) y cebadas con Fosfato biamónico al 3% mas Starce al 1%.

Su eficacia sigue siendo buena y puede servir como técnica a recomendar contra esta plaga. Además se podría usar en Agricultura ecológica.

 

Invernaderos

La superficie dedicada a esta técnica de cultivo es relativamente baja unas 200 ha, pero poco a poco se va afianzando, con un claro perfil ascendente. Aunque todavía en un plano relativamente pequeño, aparecen diversas explotaciones en las diferentes zonas dedicadas a la Agricultura ecológica. Como contra partida, aparecen nuevas explotaciones con carácter empresarial de gran superficie y cultivos con la técnica de hidroponía (12 explotaciones).

En cultivo normal destacan: tomate, pepino, pimiento, alubia verde y lechugas y en cultivos en hidroponía, el tomate y la flor cortada. En cuanto a sanidad vegetal, se mantienen las habituales plagas y enfermedades, ocupando su espacio ecológico natural, según la época del año en la que aparecen y los cultivos implantados.

Como "nueva plaga" aparecida el pasado año desde el mes de julio, en los invernaderos de pimiento de la Ribera del Aragón, figura otra mosca blanca, Bemisia tabaci, que ya estaba en nuestra Comunidad hacía tiempo en algunos cultivos de exterior, pero nunca se había comportado como plaga hasta la pasada campaña.

La Producción Integrada se desarrolla normalmente en lechuga y tomate, al igual que el control biológico, fundamentalmente en las explotaciones que tienen cultivo en hidroponía o en ecológico.

El planteamiento sanitario se basa en el manejo integral de los invernaderos: control climático (temperatura, humedad ambiente, luz), control nutricional, manejo de los suelos y de los riegos y el control biológico.

 

Hortícolas

En general y relacionado con las plagas destacar, la escasa incidencia del taladro Helicoverpa armigera, si lo comparamos con los daños que provocó el pasado año. También en general y vinculado con las enfermedades, el virus del bronceado TSWV solamente se detectó en tomate y pimiento en un invernadero y se logró totalmente frenar su evolución.

En tomate y pimiento, al contrario que el tomate, se mantiene como base de las pequeñas explotaciones familiares y en parcelas de pequeñas. Además es un cultivo peculiar por su escasa mecanización y en especial por su recolección, totalmente manual.

La superficie de pimientos no alcanzó las 1.000 ha y el aumento registrado del tipo plaza fue debido al California. La superficie de tomate duplicó a la del pimiento. La climatología adversa e irregular, causó problemas desde la implantación a recolección. Incluso las inundaciones de primeros de septiembre, arrasaron en muchas localidades del sur de la Ribera gran parte de los cultivos todavía en marcha, esencialmente tomate, llegando en muchos casos a pérdidas del 100%.

En la producción influyó de manera decisiva las nuevas técnicas de cultivo, acolchados y riego por goteo en detrimento de lo tradicional. En sanidad vegetal apartado plagas, hay que destacar el foco de mosca blanca B. tabaci que afectó a los cultivos de tomate, berenjena y pimiento, sitos en la ribera del Aragón. Su presencia empezó a notarse a finales de julio y su mayor presión entre finales de agosto y mes de septiembre. En ningún momento aparecieron virosis.

En tomate para pelado los daños fueron mayores, sobre todo por las toxinas inoculadas en el fruto con las picadas y también en parcelas que habían tenido una mala implantación. Al ser un cultivo de porte rastrero, fue imposible llegar con el tratamiento a todas las partes de la planta.

En pimiento los daños fueron menores ya que los tratamientos llegaban mejor a todas las zonas y se podían reducir las poblaciones mas fácilmente. Se apreció que la incidencia de la mosca era diferente según tipo de pimiento e incluso en el tipo Morrón hubo diferencias varietales. Incluso en pimientos picantes, guindillas o chiles, se observó que no eran atacados por la plaga. Todo esto habrá que confirmarlo.

En el apartado de enfermedades, las lluvias y temperaturas suaves de septiembre provocaron la aparición de oidio Leveillula taurica y alternaria (Alternaria solani), sobre todo en tomate, llegando en alguna parcela a no recolectarse al haber perdido su calidad comercial. En espárrago, sigue disminuyendo su superficie situándose en unas 2.000 ha. A pesar que la campaña de recolección (marzo-junio) se realizó sin problemas, previo a la misma, hubo bastantes problemas en la preparación del terreno por el exceso de lluvias. Dio como resultado una recolección corta y de escasa producción.

En plagas hubo menor incidencia de mosca del turión Phorbia platura. Sin embargo, a partir de septiembre, se observaron poblaciones importantes de pulgón Brachycorinella asparagi acompañadas por los típicos "bonsais", provocados por las toxinas del insecto. Esto ocurría en plantaciones que habían descuidado los tratamientos, ya que puede controlarse con cualquiera de los aficidas autorizados en el cultivo.

Este hecho favorecerá los ataques de Fusarium spp y provocará reducción de calibre y calidad del turión al abrirse sus yemas. En enfermedades y por las lluvias otoñales, la roya Puccinia asparagi surgió con fuerza en todas las áreas de cultivo. Los tratamientos con Baycor, hexaconazol, Impact, miclobutanil y Score, consiguieron cortar y frenar las infecciones. En alcachofa no se presentó ningún problema fitosanitario a destacar salvo que la Estación de Aviso tuvo que adelantar en dos meses el aviso de tratamiento del taladro Gorthyna. xanthenes.

Quizás fuese debido a que su pico de vuelo se adelantó bastante en el tiempo y además fue muy superior que años anteriores. Por lo demás esta plaga no presenta problemas de control. En crucíferas hortícolas, la sanidad vegetal no sufrió alteraciones con relación a lo que suele ser habitual todos los años.

Ahora bien, es normal encontrarse mosca blanca Aleyrodes proletella en todas las épocas de cultivo, con poblaciones controlables, pero esta campaña desde finales de agosto, comenzó a observarse en ciertas zonas, niveles más elevados de lo normal. Los tratamientos químicos lograron frenar la evolución de la plaga, consiguiéndose los mejores resultados con Actellic, Confidor y naled. Ahora bien, cuando se llega a tener todas las plantas atacadas y además con altas densidades, es imposible erradicar la plaga.

Para controlar el problema es necesario compaginar medidas culturales y medioambientales, con el fin de conseguir un mayor y mejor equilibrio del ecosistema implicado, que se completará, cuando sea necesario, con tratamientos químicos.