Sesión técnica: CÍTRICO - FRUTAL - OLIVO

El cultivo de los cítricos en la Región de Murcia, ocupa casi 39.000 has, de las que 25.000 corresponden a limón y el resto a naranja, mandarina, pomelo y otros cítricos.

De entre las numerosas plagas que afectan al cultivo, algunas de ellas, quizás las más importantes, pueden ser monitorizadas por medio de trampas cebadas con feromonas, como es el caso de prays (Prays citri), mosca de la fruta (Ceratitis capitata), piojo rojo (Aonidiella auranti), piojo blanco (Aspidiotus hederae), melazo (Planococus citri), minador de las hojas (Phyllocnictis citrella), o cacoecia (Cacoecia pronuba).

Para ello se utilizan feromonas de hembra, impregnadas en los cebos colocados en las trampas, para atraer a los machos adultos de la misma especie.

Las trampas que se utilizan pueden ser de tipo delta o similar, donde los adultos quedan pegados en la superficie de la trampa, gracias a una cola que no se seca, o bien pueden introducirse en una trampa, de diversos tipos, de cuyo interior no pueden salir. Generalmente, en el interior de la trampa se coloca un recipiente impregnado de insecticida que mata los adultos, impidiendo así que puedan escapar de la misma.

En la mayoría de los casos, para el control de la evolución de la población de un parásito, puede ser suficiente con la instalación en una explotación de una estación cada 20 has o fracción, compuesta por tres trampas del tipo adecuado a la plaga a controlar, cebadas con los cebos correspondientes. Controles semanales o a intervalos menores, facilitan datos por lo general suficientes, para poder adoptar decisiones en cuanto a las medidas de control más adecuadas para la plaga en cuestión. Para fincas con situaciones o características diferentes en distintas áreas, puede ser necesaria la instalación de más de una estación, aunque la superficie total de la finca sea más pequeña de 20 has.

Para algunas plagas, los datos obtenidos en los controles periódicos de las trampas, permiten estimar la evolución y el volumen de la población total y por tanto la peligrosidad para el cultivo en cada momento, según el estado fenológico de este (caso de prays, mosca de la fruta, cacoecia). En otros casos, la detección de los machos adultos, permite conocer el periodo de apareamiento y fijar con mayor exactitud etapas posteriores del ciclo del insecto, como la eclosión de larvas, la ocupación de adultos, etc., (caso de las cochinillas en general).

En algunos casos se ha intentado el uso de feromonas para aplicar métodos directos de lucha contra algunas de las plagas de los cítricos, con resultados dispares. Así, en los años 80 se ensayó en Murcia, durante dos años, la técnica de captura masiva de adultos de prays en fincas de limonero, sin alcanzar resultados efectivos que permitiesen recomendar la técnica a los agricultores.

Otro caso singular es el de la mosca de la fruta, contra la que hace más de dos décadas, se ha venido utilizando Trimedlure (una paraferomona) para la captura masiva de machos adultos de la mosca, por medio de los mosqueros de plástico blanco que, por millones, se han llegado a distribuir en nuestra Región, sin que durante su uso, se consiguiese una reducción sustancial de la plaga, una minoración suficiente de los tratamientos o una evitación de los daños.

Más recientemente, contra esta plaga, se han puesto a punto otros sistemas de lucha contra la plaga, utilizando trampas o mosqueros más adecuados al fin propuesto, cebados con atrayentes alimenticios y en algunos casos, con feromonas, con distintas finalidades, como es la captura masiva, atraer y esterilizar o atraer y matar.

Como conclusión, podemos añadir que cada vez es más importante disponer de herramientas de apoyo a la decisión en la lucha contra las plagas, como son las feromonas. Por otro lado, la disponibilidad de nuevos sistemas de difusión, de nuevas técnicas de captura de adultos o de modificación de la conducta de estos, resultan necesarios para hacer frente a las exigencias de los mercados, ofreciendo métodos seguros y respetuosos de lucha contra las plagas de los cítricos.

Comprar Revista Phytoma 183 - NOVIEMBRE 2006