La Dirección General de Sanidad de la Producción Agraria ha autorizado el uso y la comercialización de los productos fitosanitarios formulados a base de spinetoram 25% [WG] P/V para el control, por un lado, de Scirtothrips aurantii en plantaciones de cítricos y caqui en Huelva; y por otro, del trips de la orquídea (Chaetanaphothrips orchidii) en naranjo y mandarino en algunas comarcas de la Comunidad Valenciana.

La autorización tendrá efecto en la provincia de Huelva del 4 de marzo al 31 de mayo para caqui, y entre el 1 de mayo y el 28 de agosto para los cítricos, mientras que en la Comunidad Valenciana podrá utilizarse del 3 de junio al 30 de septiembre.

El trips de la orquídea se detectó primero en Tarragona, en 2016, y un año después apareció en la Comunidad Valenciana. Actualmente, ya está presente en doce comarcas citrícolas de las tres provincias: L'Horta Sud, Ribera Alta, Ribera Baixa, La Costera y La Safor (Valencia), L'Alacantí, Baix Segura, La Marina Baixa y La Marina Alta (Alicante) y Baix Maestrat y La Plana Alta (Castellón). Esta plaga se hospeda fundamentalmente en las naranjas, a las que provoca manchas y lesiones muy apreciables en la piel de los frutos. Su ataque no mata al fruto, pero sí causa daños estéticos que deprecian su valor comercial.

Precisamente, en los ensayos de eficacia de insecticidas realizados por el IVIA, spinetoram ofreció los mejores resultados, pero no está autorizado en cítricos, como tampoco metil-clorpirifos, prohibido desde 2020. Las materias activas autorizadas más eficaces fueron etofenprox, tau-fluvalinato y sulfoxaflor, pero las dos primeras pertenecen a la familia de las piretrinas, por lo que conviene disponer de materias activas alternativas para evitar la aparición de resistencias.

En cuanto a Scirtothrips aurantii , fue detectado en octubre de 2020 por el Laboratorio de Control Oficial Agroalimentario y Agroganadero de Huelva, en una muestra recogida en las prospecciones realizadas dentro del Plan Andaluz de Vigilancia Fitosanitaria en Cítricos. El principal daño de esta plaga polífaga se localiza en las hojas al alimentarse, lo que origina un descenso de la producción y la calidad de la fruta producida. También destaca el daño al fruto, que origina destrío en la producción destinada a consumo en fresco.

Los tratamientos fitosanitarios contra este trips deben ir dirigidos a los estados de desarrollo que están presentes en la parte aérea de las plantas, adultos, huevos y ninfas, ya que los estados que completan su desarrollo en el suelo (pupa y prepupa) están más protegidos y son de menor accesibilidad.