Dentro del proyecto CONBIOGRAIN, el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA) evaluará el potencial de los dos ácaros depredadores más comunes en los almacenes de arroz y de diversos parasitoides para hacer frente a las plagas más habituales.

Normalmente, la respuesta a las plagas en los almacenes de granos de arroz es la aplicación de productos fitosanitarios, pero su uso continuado promueve resistencias a los insecticidas y estos pierden eficacia. El IRTA quiere ampliar el conocimiento sobre los principales depredadores y parasitoides, y sobre las interacciones tróficas que tienen lugar en los almacenes de este cereal, para promover el control biológico.

Primero se evaluarán diversos aspectos biológicos de dos ácaros depredadores – los géneros Blattisocius y Cheyletus –, comunes en los almacenes de arroz en España, para conocer su papel en el control de las principales plagas de insectos. Para ello, se muestrearán almacenes de arroz, se identificarán los individuos morfológicamente y molecularmente para conocer la especie, y se estudiará el rango de presas de las cuales se alimentan cada una. También se estudiará su dispersión, persistencia y eficacia para controlar las plagas en los montones de arroz y las estructuras de los almacenes.

Además, se evaluará la mejora de la eficacia de diversos himenópteros parasitoides para controlar las plagas, como Cephalonomia tarsalis, parasitoide del coleóptero Oryzaephilus surinamensis; Anisopteromalus calandrae, parasitoide de los también coleópteros Sitophilus granarius, S. oryzae, S. zeamais y Ryzopertha dominica; y Habrobracon hebetor y Trichogramma spp., parasitoides de las polillas Plodia interpunctella y Ephestia kuehniella.

Finalmente, se estudiarán las interacciones tróficas entre las principales plagas de los almacenes y sus enemigos naturales. El instituto catalán utilizará técnicas como la PCR convencional o la metagenómica para poder analizar el ADN ingerido por los ácaros depredadores de los géneros Blattisocius y Cheyletus. El uso de estos métodos moleculares permitirá desvelar el papel de cada depredador sobre cada plaga, un conocimiento necesario para poner en marcha un programa de manejo integrado de las plagas basado en el control biológico en las industrias de grano almacenado.

El proyecto tiene una duración de tres años y ha sido financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación, la Agencia Estatal de Investigación y el FEDER (PIC2021-1252840R-I00).