En 2023, la venta de fitosanitarios en la Unión Europea se situó en torno a 292.000 toneladas, el nivel más bajo desde 2011, cuando Eurostat (Oficina Estadística Europea) comenzó a publicar la serie de datos. Esto supone una disminución del 9% respecto a 2022 y del 18% en comparación con 2021. En España, las ventas alcanzaron las 52.906 toneladas, una reducción del 6,1% respecto al año anterior, en el que ya se había registrado una fuerte caída del 26% respecto a 2021. En dos años, las ventas nacionales se han desplomado un 30,5%.
Según el análisis de Eurostat, la fuerte caída de las ventas que ya se dio en 2022 pudo atribuirse en parte al aumento de los costes de los plaguicidas, impulsado en gran medida por la guerra en Ucrania y la consiguiente inestabilidad en los mercados. También se observó una desaceleración de la economía en 2023, lo que podría ser un factor que explique esta nueva caída. No obstante, las fluctuaciones en las ventas también se ven afectadas por las condiciones agrometeorológicas y económicas imperantes.
En 2023, Francia (23%), España (18%), Italia y Alemania (14%) representaron la mayor parte del volumen de ventas de fitosanitarios. Con el 52% de la superficie agrícola utilizada de la UE, y el 49% del total de tierras cultivables, estos cuatro países son los mayores productores.
Entre 2011 y 2023, se observaron marcados contrastes en la evolución de las ventas de fitosanitarios. De los 21 países con datos disponibles, se registraron menores volúmenes de venta en dieciséis países de la UE, siendo los cuatro con mayores descensos observados en Italia y Portugal (con una disminución del 44%), seguidos de Irlanda y Eslovenia (38%). Por el contrario, se registraron mayores volúmenes de venta en cinco países de la UE, sobre todo Letonia (55%), Austria (52%) y Lituania (11%).
En cuanto a los tipos de plaguicidas vendidos en la UE, las principales categorías en 2023 fueron fungicidas y bactericidas (39% del volumen de ventas); herbicidas, destructores de follaje y eliminadores de musgo (36%); insecticidas y acaricidas (17%).
Dentro de la primera categoría, los fungicidas inorgánicos representaron el 62,9% del total, y engloban a compuestos de cobre, azufre inorgánico y otros fungicidas inorgánicos, muchos de los cuales también están permitidos en la agricultura ecológica.
Casi el 95% de las ventas de insecticidas y acaricidas correspondió al grupo de ‘otros insecticidas’, que incluye diecisiete clases químicas, como los insecticidas de piridilmetilamina, los insecticidas fermentativos y las feromonas de lepidópteros, con unos cuarenta atrayentes de insectos diferentes. Le siguen los formulados a base de piretroides, que representaron el 4,1% de las ventas totales.