Un estudio de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica de la Universidad Politécnica de Cartagena confirma que la resistencia a diamidas está bastante extendida en las poblaciones españolas de Tuta absoluta, pero no ha detectado ningún caso de resistencia a otros insecticidas muy utilizados para el control de la principal plaga del cultivo del tomate en España: spinosad, indoxacarb y emamectina.

La especulación sobre la baja eficacia de otros compuestos despertó las alarmas en el sector ante un posible desarrollo de resistencias de Tuta absoluta a otros insecticidas. Por ello, Nerea Celdrán, Patricia Martínez-Barbero, Carolina Grávalos y Pablo Bielza, del Departamento de Ingeniería Agronómica, realizaron un estudio para determinar científicamente el nivel real de resistencia a los principales insecticidas utilizados para el control de la polilla del tomate. Los resultados de este estudio acaban de ser publicados en la revista Phytoma.

En los bioensayos de T. absoluta realizados en el laboratorio de Protección de Cultivos de la Universidad Politécnica de Cartagena, todas las poblaciones mostraron niveles elevados de resistencia a la diamida clorantraniliprol. Por el contrario, fueron muy susceptibles a los insecticidas spinosad, indoxacarb y emamectina. “Es importante recordar la necesidad de seguir una gestión integrada mediante estrategias de control basadas en medidas culturales, biotécnicas, biológicas y químicas, incluyendo estrategias apropiadas de manejo de la resistencia. Se puede consultar las indicaciones de IRAC España en el uso de los productos para prevenir el desarrollo de resistencias”, recuerdan los autores de este estudio.

La aparición de resistencias a los insecticidas formulados con diamidas complica el control de Tuta absoluta en los invernaderos de tomate. Así lo advirtió el Comité de Prevención de Resistencias Insecticidas (IRAC) en España, después de haber sido ejemplo de buena gestión de la resistencia, capaz de contener su desarrollo, mientras se detectaban casos en invernaderos de tomate en zonas de Italia, Grecia, Francia e Israel. Pero en 2017 y 2018 ya se documentaron poblaciones resistentes del lepidóptero en las provincias de Sevilla y Cádiz, y durante 2019 los casos se extendieron al sureste de España.

Según IRAC-España, grupo de trabajo dedicado a promover la investigación y la divulgación sobre resistencias a insecticidas, son varios los factores que han incidido en el incremento de casos de resistencia a este grupo químico. En primer lugar, “se está produciendo un aumento del número de tratamientos fitosanitarios en detrimento del uso de herramientas de control integrado de plagas, como los agentes de control biológico (Nesidiocoris tenuis) y las trampas cromotrópicas, etc”. Por otro lado, las restricciones de algunas cadenas de supermercados “limitan arbitrariamente el número de posibles trazas de residuos, obligando a los productores a realizar un mal uso de las herramientas disponibles”. Además, también se está produciendo un uso indebido de algunas de las sustancias activas registradas, usándolas vía riego cuando su registro es sólo vía foliar, exponiendo a los insectos objetivo a dosis sub-letales.

Para prevenir la aparición de resistencias, IRAC-España recomienda no usar un mismo modo de acción en generaciones sucesivas, alternando productos de diferente modo de acción o utilizando ‘ventanas aplicación’. En el caso de las diamidas, se recomienda un máximo de dos periodos de tratamiento (con uno o dos tratamientos consecutivos con diamidas) por ciclo de cultivo, dejando un intervalo mínimo de sesenta días entre periodos de tratamiento. Se puede hacer un máximo de cuatro aplicaciones con productos que contengan diamidas por ciclo de cultivo.

Como norma general, la exposición total de lepidópteros a un mismo modo de acción por ciclo de cultivo jamás debería exceder el 50% del total de las aplicaciones realizadas. Por último, este grupo de trabajo aconseja seguir siempre las indicaciones de etiqueta en cuanto a número de aplicaciones registradas/año, forma de aplicación y resto de limitaciones de uso.