Investigadores del CSIC han desarrollado una herramienta digital predictiva que puede ayudar a limitar las poblaciones de Philaenus spumarius, principal vector en Europa de la Xylella fastidiosa. Los resultados sugieren que aplicar medidas de control en dos fechas diferentes permitiría optimizar la eliminación de las poblaciones de ninfas en el campo, lo que reduciría considerablemente los riesgos de dispersión de la enfermedad.

El estudio, publicado en la revista Environmental Entomology de la Sociedad Americana de Entomologia, fue realizado entre el Instituto de Ciencias Agrarias (ICA-CSIC) y el Instituto de Física Interdisciplinar y Sistemas Complejos (IFISC) (CSIC-UIB). El equipo de investigación monitorizó los huevos de P. spumarius, desde la oviposición hasta la eclosión, junto con las temperaturas diarias y las humedades relativas en cuatro ubicaciones de campo en la Comunidad de Madrid que estaban a diferentes altitudes. Los datos recopilados se utilizaron para construir un modelo de crecimiento en función de la temperatura acumulada (grados-día) para pronosticar la eclosión de huevos del insecto en la península ibérica. Además, el modelo se validó con observaciones de campo realizadas en diferentes localidades.

A partir de los datos de campo obtenidos, el estudio plantea un modelo matemático con el que se ha construido la herramienta de apoyo a la toma de decisiones (DSS) que calcula el momento de eclosión de los huevos de P.  spumarius. Para ello, utiliza la información proporcionada por las estaciones de la AEMET, que permite determinar los momentos adecuados para aplicar medidas de control sobre las ninfas (estado idóneo de intervención de la plaga), como labores superficiales o desbroce.

P. spumarius es un insecto polífago del grupo denominado comúnmente como cigarrillas, que se encuentra presente en prácticamente todo el hemisferio norte. Durante mucho tiempo fue un desconocido para la agricultura, pero la detección de X. fastidiosa en Europa, en 2013, ha aumentado considerablemente el interés en su estudio, dado que se trata del principal vector de esta bacteria en el continente. Entender su ciclo biológico y fenología es clave a la hora de limitar la expansión de la enfermedad y su impacto en diferentes plantaciones.