Viveros Hernandorena se ha convertido en un referente de plantas a raíz desnuda en especies como almendro, kaki, kiwi, membrillo o granado, cultivos donde predomina la monovariedad y reducidas combinaciones variedad-patrón, lo que permite una mejor gestión del campo de vivero. La empresa valenciana ha pasado de 150.000 plantas a raíz desnuda hace cinco años a 400.000 esta campaña.

“El vivero de plantas a raíz desnuda nos permite disponer de grandes volúmenes y atender así la demanda de nuestros clientes en un momento muy determinado, de diciembre a marzo, periodo en el que se deben llevar a cabo las plantaciones”, explica Rosa Hernandorena, directora comercial de Viveros Hernandorena.

La planta que se comercializa a raíz desnuda ha estado en vivero de campo entre uno y dos años dependiendo de la especie. Se trata de una planta homogénea en cuanto a altura y calibre, bien formada, cortada a una altura de 1,2 metros, y que ha recibido los máximos cuidados durante su periodo en campo. “Consideramos que una planta bien cuidada en vivero es sinónimo de calidad, por eso invertimos mucho en todas las tareas a realizar en su preciso momento: una buena preparación del terreno, en labores y analíticas pre-plantación, fertiirrigación controlada continuamente, podas y guiados, en tratamientos de pre-emergencia, control de plagas y en las tareas post arranque”, argumenta Rosa Hernandorena.

El corte de la planta a 1,20 metros está siendo clave para el ahorro de costes logísticos para los clientes ya que, gracias a esta altura, no solo es más sencillo el trabajo post arranque en el vivero, sino también se reduce el espacio que ocupan los palets a la hora de su transporte.

Una de las grandes diferencias de Viveros Hernandorena con respecto a otros viveros es que todas las tareas previas a la expedición de la planta a raíz desnuda, como son la selección, el enfardado, la limpieza o la paletización, se llevan a cabo en el almacén. De esta forma, se preserva la frescura de la raíz. Además, disponen de cámaras frigoríficas específicas para las existencias y trabajan con operadores logísticos a los que les han transmitido su know-how para lograr que la planta viaje en las mejores condiciones posibles, hasta la entrega al cliente.

La empresa, referencia en frutales de hueso en maceta, ha aumentado la superficie de campo de vivero: de ocho hectáreas en 2018 a 20 en la actualidad, lo que les ha permitido aumentar el número de especies y el volumen disponible. En los campos de vivero se lleva a cabo el control integrado de plagas y enfermedades, y comienzan ya a aplicar algunas estrategias de control biológico al aire libre.

En almendro, para este periodo de final de campaña, la empresa ha puesto en marcha una campaña promocional, con importantes descuentos para la compra de plantas.