Sección: Reuniones y congresos

El pasado 8 de junio el Dr. Nimrod Israely (Hebrew University of Jerusalem) realizó una visita a la Unidad de Entomología del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA).
El Dr. Israely ha estudiado durante más de 10 años la ecología de las poblaciones de la mosca del Mediterráneo (Ceratitis capitata) en Israel, siendo actualmente uno de los mejores conocedores de este campo. Dicha visita tenía como objetivo el intercambio de ideas y la puesta en común de las similitudes y diferencias sobre aspectos de la biología, ecología y el manejo de Ceratitis capitata en la Comunidad Valenciana e Israel.

Aprovechando su estancia, el Dr. Israely impartió un seminario en el salón de actos del IVIA cuyo título fue "Ecología y perspectivas de control de la mosca del Mediterráneo". Al seminario acudieron representantes de distintos sectores relacionados con el estudio, manejo y control de C. capitata en la Comunidad Valenciana.

El contenido del seminario giró en torno a dos aspectos novedosos sobre la ecología de C. capitata: la hibernación y su capacidad de migración. Para ello, presentó diversas experiencias que llevó a cabo desde 1994 hasta 2003 en Judean Hills (ª10km2), en las montañas centrales de Israel, una zona un poco más fría que Valencia, pero donde se localizan numerosos cultivos que C. capitata ataca cada año (cítricos, higos, nísperos, cerezas o manzanas). En esta zona realizó un seguimiento de las poblaciones de C. capitata mediante capturas en trampas Steiner cebadas con tridmelure y observó que la mosca del Mediterráneo atacaba año tras año los cultivos, desde finales de mayo e inicios de junio hasta finales de diciembre. Sin embargo, no pudo capturar adultos desde enero hasta finales de mayo. Para poder comprobar si los estados inmaduros de la mosca eran capaces de sobrevivir al invierno, mostró una serie de experiencias en las que enterraba experimentalmente larvas y pupas en diversas épocas del invierno y primavera, sin poder obtener posteriormente adultos. Además, en campos donde se había producido una alta presión natural de ataque de C. capitata durante el otoño, intentó obtener adultos en el invierno y primavera mediante la utilización de jaulas y lonas sobre la superficie del suelo, y tampoco consiguió ningún adulto. Otra de las experiencias interesantes mostradas durante el seminario consistió en eliminar y tratar químicamente todas las frutas huésped en la zona de estudio para observar la población de C. capitata al año siguiente. Un ejemplo de estas medidas ?sin duda la más expeditiva y arriesgada de todas? fue cortar todas las higueras presentes en la zona: ¡a pesar de no haberse obtenido fruta atacada durante toda la campaña, durante el verano siguiente se capturó sorprendentemente la misma cantidad de adultos en las trampas que en años precedentes!

A partir de estas experiencias, el Dr. Israely demostró que C. capitata no era capaz de hibernar en las montañas centrales de Israel, y que año tras año invadía la zona de estudio mediante migraciones de más de 40 km procedentes de zonas más cálidas, donde sí que lograba hibernar. Estas nuevas aportaciones pueden ser fundamentales en la interpretación del mapeo geográfico y climático de C. capitata, y por consiguiente en un mejor diseño de los protocolos de control a gran escala. Por ejemplo, en la zona de estudio, Judean Hills, cada año se realizaban de manera sistemática tratamientos en otoño con el objeto de reducir las poblaciones al año siguiente de C. capitata. Con estos nuevos datos se demuestra que dichos tratamientos son innecesarios, ya que cada año la mosca vuelve a invadir los cultivos procedente de zonas climáticas más cálidas.

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