Mucho es lo que han avanzado en investigación los centros en los que se trabaja sobre el conjunto de la agricultura. Entre ellos, destacamos la aportación del Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos (IATA), el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA), así como en la Universidad, en concreto el departamento de Sanidad Vegetal, que es el caso al que nos referimos. Y todo ello, siempre juntos, muy juntos, en los medios económicos de modo natural, aunque ya hemos superado aquello del que "inventen ellos", en su espíritu y acción.

De ello nace el que los investigadores agrícolas sean reconocidos en todo el ancho mundo, en especial cuando se refiere a los problemas de la citricultura y a algunos otros muy puntuales.

Nos ha llegado un libro quizá poco conocido en nuestro país dado a luz por los investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia, más comúnmente denominado "tarongers", por el lugar concreto donde está instalada. En él, y por su Departamento de Sanidad Vegetal, se ha dado a luz al "EL CULTIVO DEL NÍSPERO JAPONÉS", al alimón por los investigadores Manuel Agustí y Carmina Reig, con la edición de los citados y P. Undurraga (eds.), y con la estrecha colaboración de la Universidad Nacional del Litoral (Argentina) y de la Universitá Degli Studi di Palermo (Italia), con el apoyo de las empresas chilenas Xilema Biocontrol, Agrícola Industrial Agronova Ltda., Merex Chile, Agrícola El Roble, Inversiones Quintil S.A., Matco Antonio Mattar y Leiva Hermanos.

Por supuesto que, además de la colaboración de los citados se ha contado con parte española como la Cooperativa de Callosa d?Ensarria y la financiación de la Conselleria de Agricultura de la Generalitat Valenciana. Por supuesto los organismos de investigación española han dejado también su huella.

Así, este libro de investigación sobre el cultivo del níspero japonés es algo inédito en nuestro país que, sin embargo, tiene su puesto en el mercado europeo, muy especialmente en Italia. Porque las experiencias han mostrado que es una fruta, minoritaria aquí, pero muy extendida en los países del Adriático, especialmente en Japón, y algo más que esos árboles que conocemos plantados mayormente en las zonas de Sagunto (Valencia), como protección contra el viento en los huertos de cítricos.

La investigación acomete todos los trabajos que precisa el arbolado nísperero para que sus frutos sean apetitosos en su calibre, así como su interior de satisfacción a los que gustan, especificando cómo acometer dichos trabajos, sobre los que ya existen en nuestro país, y más concretamente en la Comunidad Valenciana, técnicos conocedores ampliamente de ellos.

Excusado es decir que la publicación de este volumen, con la ayuda de la Consejería valenciana, cubre ampliamente el conocimiento de lo que hay que hacer con este fruto, que ocupa un pequeño lugar en el occidente europeo, pero que ello incita a despertar el interés del consumo.