En el año 2009, en parcelas de cítricos del norte de la provincia de Valencia se detectó un insecto pseudocóccido que se identificó como la especie Delottococcus aberiae (De Lotto). Este insecto ocasiona intensas y tempranas deformaciones en los frutos que se mantienen hasta su maduración, produciendo esto una importante depreciación económica. Los muestreos realizados todos estos años han revelado la ausencia de enemigos naturales que se comporten de manera eficaz en el manejo de la plaga. Las especies de parasitoides existentes en la Comunidad Valenciana no son capaces de parasitar las poblaciones de D. aberiae y los principales depredadores aparecen tarde, cuando el daño en los frutos ya está provocado. Es por esto por lo que la gestión de esta plaga se ha basado exclusivamente en la utilización del control químico con materias activas que, debido a las nuevas normativas, cada vez están más restringidas. Con esta perspectiva parece que la mejor opción para abordar el control eficaz de esta plaga es desarrollar un programa de control biológico clásico. En este artículo se presentan los primeros estudios realizados para poner a punto la introducción, desde su lugar de origen, de la especie Anagyrus aberiae Guerrieri, parasitoide del pseudocóccido Delottococcus aberiae. Esta implementación puede representar una alternativa eficaz y sostenible a la aplicación de plaguicidas.

En el año 2009 fue detectado en parcelas de cítricos de la Comunidad Valenciana el pseudocóccido Delottococcus aberiae. Esta especie ha resultado ser una de las plagas más problemáticas en los cítricos debido a que, muy tempranamente, se instala en los frutos produciendo importantes deformaciones en ellos (Foto 1). Este tipo de daños no había sido observado anteriormente en parcelas de cítricos con presencia de otros pseudocóccidos como es el caso de Planoccocus citri Risso. Desde entonces se han estado llevando a cabo numerosos estudios para conocer diversos aspectos de la biología, comportamiento y metodologías de manejo de esta plaga.

En la actualidad, se conoce que D. aberiae presenta varias generaciones al año como ocurre en otros pseudocóccidos, siendo dos de ellas, entre los meses de mayo y julio, las que destacan en importancia por ser las que dan lugar a grandes densidades poblacionales de la plaga (Martínez-Blay y col. 2018a). También es conocida su distribución, movilidad (Martínez-Blay y col. 2018b), los patrones de agregación que presenta, las técnicas de muestreo y sus umbrales (Pérez-Rodríguez y col., 2017), así como los tipos de daños que produce y el periodo en el que es capaz de producir las deformaciones en los frutos. Los enemigos naturales que disponemos en nuestro país no ejercen una actuación eficaz para disminuir las poblaciones de la plaga en el momento adecuado. Entre los depredadores se encuentra principalmente la especie Cryptolaemus montrouzieri Mulsant. Este coccinélido tiene un buen efecto depredador sobre el principal cotonet de los cítricos Planococcus citri (Garcia Marí, 2012); el aumento de la abundancia de C. montrouzieri proporciona también una importante disminución de la población de D. aberiae, pero no suficientemente significativa como para controlar el daño que produce la plaga en los frutos.

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